Ayer una amiga querida me mandó un mensaje cariñoso de buenas noches, no sería mas tarde de las diez y me decía que ya estaba en cama, agotada por una dura jornada, en una semana dificil y en un largo, largo invierno que ha devorado a la primavera. Me pedía algo que me gustó, mas bien me emocionó, me pedía, escríbeme algo, que me gusta mucho cuando escribes y me relaja, me hace soñar.
Sólo con que por unos momentos consiguiese que se pudiera olvidar del trabajo, los problemas y las complicaciones de la vida cotidiana, merecería dedicarle este pequeño rato que dedico también a soñar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario