poder hablar, al fin

Hoy hemos conseguido hablar por teléfono, despues de guasapear todos los días como si estuvieras aquí, como siempre, y despertarme con tus mensajes que me animan el día, al fin hemos hablado.Ya sabes que lo del skype no es lo mío, que nos sale papada y se paraliza la imagen, aunque me encanta apagar la cámara y verte a ti.. Es como si no pasara el tiempo, es lo que me gusta de ti, tus risas, tus prisas, estar en tres conversaciones a la vez, con tu amiga marta, con el de la pizzería y hacerme creer que soy tu principal y única ocupación. Ponernos al día un poco mas y hacerme sentir que el tiempo no ha pasado. Hacer planes de vernos en primavera, pensando en disfrutar del dolce far niente y de cansarme de comer, cuando para liberar el estres te pondrás a cocinar como un poseso, algún plato de tu abuela Mari. Y de jugar con el pequeño, que te despertará por la mañana, cuando estés con una resaca de caballo y los ojos pegados, le diré, vete a despertar al tío Antonio.Y de cansarnos de hablar de Faisal y de Glasgow y del nuevo trabajo y de tantas cosas buenas que seguro te ocurriran, me ha encantado volver a hablar contigo.